Cada 24 de junio, en el Cusco se realiza una de las festividades más solemnes y grandiosas del desaparecido Imperio Incaico: el Inti Raymi o también llamada fiesta del sol. Una fiesta que se celebra con mucho entusiasmo desde hace 69 años. Cargado en una litera de oro y plata, el Inca soberano hace su ingreso a la fortaleza de Sacsayhuamán al son de pututos, cornetas, tambores y quenas. Extendiendo sus brazos, el Inca le ora en quechua al dios Sol, y en un acto de sumisión le promete obediencia, respeto y adoración ante la atenta mirada del público.
Por lo general, en esta fecha el sol está en su punto más bajo y alejado del Cusco. El Inca pide volver al astro rey para fecundar la tierra, dando inicio a la época de siembra, que traerá el bienestar a los hijos del Tahuantinsuyo.
Gustavo Vivanco, presidente del directorio de la Empresa Municipal de Festejos del Cusco (Emufec), indicó que se están tomando todas las medidas para que se realice un buen espectáculo.
Para esta fiesta tradicional del Inti Raymi se espera congregar este año a unas 80 mil personas.
Destacó que existe una alta reserva de las 4 mil butacas que se ofrecen en la explanada. “Los precios serán los mismos que el año pasado: preferencial 130 dólares y zonas laterales 90 dólares”, aseguró Vivanco. Asimismo resaltó que los tickets se pueden separar a través de la página emufec.gob.pe.
Para esta gran ceremonia se tiene prevista la asistencia de más de 200 alcaldes provinciales y regionales de todo el país. Asimismo la asistencia de embajadores sudamericanos. La presencia del presidente de la República, Ollanta Humala, está aún por confirmar.
Se supo que unos 700 artistas, entre músicos, danzarines, soldados, el inca y su séquito, se vienen alistando desde hace un mes para realizar con calidad esta importante escenificación incaica.